jueves, 10 de mayo de 2012

Luna, Eso Soy!


En esta noche, tormentosa en la cual no llueve… Alivio que me diera que fuesen las gotas de lluvia las que inundan mi alma, y nos los gritos melancólicos de una sociedad disfuncional.

Disfuncionalidad, palabra la cual preferiría y no tuviese significado alguno en esta vida, en mi vida. Vida algo que el mundo trata de arrebatarme constantemente, mas soy guerrera de la luna, soy Luna encarnada, siempre resplandeciente y nocturna. Por fuerte que sople el viento permanece su luz, tan solo el moverse agita mareas. Luna, eso soy!

Y que soy? A veces es una visión tan borrosa y abstracta. Quizás muestro aquello que no soy y que anhelaría ser, “fuerte”. Fuerza que ha desvanecido con cada ciclo lunar, cada vez más humana e inhumana; los polos de la ironía eso soy!

Soy tanto como quiero ser, tanto que no puedo…

La tierra por madre, pues con la única que se mantiene, siempre dispuesta a verme alrededor de ella. Por padre el viento, sabio e impetuoso viento, reencarnado en el mas imperfecto y noble de los seres humanos. Mas mi madre, ironía que no encuentre reencarnación.  Más sublime la tierra que me acoge y ayuda a germinar como semilla en ella.

Esta noche la melancolía planea hacerme suya; mas la fiel de soledad arremete feroz entre líneas, planeando recuperar su Luna.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Comernos a besos, tan utópico como nuestra esencia misma!


El aire huele a besos de vainilla, sabe a besos de fresa; besos que recuerdan el “idilio” entre el astro y la mortal… Se respira besos, se sienten besos… Besos de un “amor” tan terrenal y sublime como la sola idea de coincidirnos “juntos”…

Mas esta vez no es esa casa, aquella que nos sirvió como testigo en medio de esa noche contigo Luna. Mas esta vez el beso solo es recuerdo y no “realidad”. Realidad que logra acongojarme, el recuerdo de lo que fue y no será.

Y pregunto En qué dimensión paralela  me encuentro, como anhelo los besos de tan ingrato astro que no planea hacerse mortal conmigo?   Quizás la mortalidad crearía cadenas, privándote de tu libertad, de mi libertad. Informalismo, propicio para tan eternas distancias, para tan distintas realidades.

Tu Astro, descarado, sigiloso, dejándote fluir en medio de tu ciclo. Tu “amado”, tú y tus descaradas preguntas… Tu osadía me sonroja, me indigna, me alaga, tu tan exquisitamente irónico…

Ironía, ironía es que ansíes mis labios, que reclames mis besos, que pidas mi compañía, mi cercanía; que quieras esto aun cuando te has tornado frió (tu naturaleza), indiferente al saberme lejos, y sobre todo conflictuado, considerando erróneo el haberte despojado de tu inmortalidad, irónico que me anheles cuando es un “error” haberte hecho humano, mortal, imperfecto conmigo, con la mortal, con la “mujer”. Mujer que te considera más sublime con el hecho de romper barreras, con el hecho de saber que me susurras al oído y no entre líneas.

Tú y tú sigiló de madrugada, mientras te desvaneces entre los rayos de sol (como si no quisieras tiempo para acercamientos), solo me buscas cuando el sol está por apoderarse de ti de mí y de nuestro encuentro.

Besos, palabra que cuando tu boca nombra logra hacer que conciba latente lo ya “olvidado”, que ansié lo ya vivido, y sobre todo que te ansié a ti nuevamente a “mi lado”… Hace que no solo sea una palabra, le das significado al beso, pues tu eres el significado del beso mismo, del beso como esencia, del beso como sublime, besos de otro espacio como tú, besos que van mas allá de lo terrenal, pero que en ti rigen superficial mente, en gusto…

Ingenua mortal, soñadora… Creyendo que puede hacer que ansíes ser menos que un astro, queriendo entre el velo de sus realidades que te “aferres” a ella. Como si pudieras aferrarte a algo, como si pudieras dejar de volar, como si pudieras dejar de temer, como si pudieras dejar de lado la pesada carga de alumbrarnos las noches.

Tú y tus contradicciones que me confunden, tú y la negación de nuestro beso, tú y tus ideas que me hacen saber que no puede volver a pasar, tú y tus descaradas preguntas que me hacen saber que quieres que te bese. Yo y mi falta de auto-control, yo y mí falta de compostura, yo y mi emocionalismos, yo y mis ganas de besarte.

Por que basas algo posiblemente hermoso y sublime en algo tan superficial y terrenal… Maldigo tu miedo, y maldigo mi incapacidad de querer ayudarte…Idónea algo que no podre serte.

Y entre mis líneas e inestabilidad, y tu descaro y superficialidad… Como siempre no está claro que tú sientes, no está claro a que te temo; mas queda claro que quiero comerte a besos, que quieres comerme a besos, que dejarías tu inmortalidad nuevamente si yo decidiera ir en tu camino; mas cuanto tiempo serias mortal?

Comernos a besos, tan utópico como nuestra esencia misma!

Beso algo tan deseado y valioso, beso algo con tantos significados si estoy contigo…  Mas esclarezco el hecho si vale un beso ir a tan infernal umbral!